Buscar

martes, 20 de julio de 2010

UNA AVENTURA SOBRE RUEDAS



Dije que si que podía desde el momento en que surgió el tema. Lo dije casi sin pensar, pero ya no había marcha atrás.

He ido mil veces acompañada pero en esta ocasión yo tenía el mando, algo muy poco usual en mí. A pesar de mi malestar quise ir, era un pequeño reto para mí y quería conseguirlo.

Nos subimos las tres en el coche, la compañía que llevaba no podría sacarme de ningún apuro si algo iba mal, pero bueno, era lo que había.

Nos pusimos en marcha y una vez allí, conseguimos llegar directamente. Tuve suerte y pude sortear al principal enemigo que me espera con una cuesta de vértigo.

A la vuelta fue más de lo mismo aunque no tuvimos tanta suerte como a la ida.

No sabía muy bien como encontrar la salida pero cuando lo hice todo fue sobre ruedas.

La carretera se avalanzaba sobre mi cochecito pero supimos deslizarnos por ella y a pesar de que nos quizo confundir metiéndonos en el peaje, conseguimos llegar a Ocaña sanas y salvas.

3 comentarios:

  1. jajajajjaja!!
    Lari es que ya estas hecha una mayor.

    Well done!

    ResponderEliminar
  2. Yo tambien tenía miedo a la cuesta, pero estaba seguro de que ibas a poder, como otras muchas cosas.

    ResponderEliminar